Listo.
Festejamos el cumple de Simón.
Vinieron sus compañeros, los varones.
Pasamos un rato hermoso.
Simón contaba los regalos. 1, 2, 3, 4..
Me pareció un poco mal y un poco lógico.
(Nos la hemos pasado diciéndole que esté agradecido, que sea cariñoso con las visitas, que no se crée expectativas desmedidas sino las justas, para poder disfrutar a pleno y sin desilusiones o malos entendidos)
Simón se pre-ocupa por los regalos.
Los sueña. Los espera. Como un niño de 8 que es.
Recibió muchísimo. Casi demasiado. Cosas hermosas.
Remeras. Chiches. Zapas. Efectivo!
Remeras. Chiches. Zapas. Efectivo!
Jamás (al menos no es esta niñez que atravieza) le diría a sus invitados:
"che, no se preocupen por los regalos.."
Como la canción de Los Arroyeños (mostré la hilacha?) que decía así:
"Que se vengan los chicos
de todas partes,
que estén los de la Luna
y los de Marte
Que se vengan los chicos
de los planetas,
prendidos de la cola
de algún cometa
Que no falte ninguno
a mi cumpleaños,
y que no se preocupen
por los regalos
Tra lara lara lara
tra lara lero,
que estén todos los chicos
del mundo entero.."
(Gracias a todos por lo que le regalaron desinteresadamente a un niño interesado (como todos los niños) Gracias. Gracias. Por las cartitas, los llamados. ¡Por todo! GRACIAS.
(Gracias a todos por lo que le regalaron desinteresadamente a un niño interesado (como todos los niños) Gracias. Gracias. Por las cartitas, los llamados. ¡Por todo! GRACIAS.
Qué risa. ¡Nuestros niños muestran la hilacha! Timo se pasó medio cumpleaños sentado al lado de la mesa de los regalos (o el altar de los regalos, como lo digo yo), porque acá los regalos no se abren en público, y la espera hasta el final del cumple fue tortuosa.
ResponderEliminar¡Qué bien que el cumple de Simón haya sido feliz! Besos grandes, lo amamos mucho.
No! No abrir los regalos hasta el final es una prueba a la paciencia muy difícil! Pero es una opción potable cuando hay una animación esperando y llega un invitado tras otro! Los míos los abren y se quieren poner a jugar. Además todos los niños tocan los regalos, los quieren, opinan... De locos. Hay que estar atentos en ese momento. Además le sacan el papel y después no sabés quién se lo regaló. Y no lo podemos agradecer como corresponde! Bue, igual todo es felicidad!! Te quiero..
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